Salina Cruz, Oax.— La constructora Ingenieros Civiles Asociados (ICA) inició el retiro de sus grúas de la refinería “Antonio Dovalí Jaime” en Salina Cruz, Oaxaca, debido a adeudos de varios meses por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex), informaron trabajadores en el sitio.
Desde la mañana del viernes se desmontó una grúa de 3 mil 500 toneladas de capacidad, mientras que otras permanecen en un predio cercano bajo resguardo de la CTM, que mantiene su exigencia de pago de pasivos.
De acuerdo con obreros y empresarios locales, Pemex adeuda alrededor de 50 millones de pesos a personal y proveedores vinculados a ICA. A nivel macro, contratistas estiman que la deuda específica con la constructora por la planta coquizadora asciende hasta 2 mil millones de dólares, lo que ha impedido a ICA cumplir con compromisos con subcontratistas y proveedores de la región.
En los últimos meses se habrían registrado despidos de cerca de 4,000 trabajadores, lo que, según líderes sindicales, mantiene al proyecto prácticamente paralizado.
La planta coquizadora, iniciada en agosto de 2022 con una inversión anunciada de 60 mil millones de pesos, estaba programada para entrar en operación en el primer semestre de 2024. Según estimaciones oficiales del sexenio anterior, su funcionamiento permitiría aumentar en 70 mil barriles diarios la producción de gasolina, además de reducir combustóleo y mejorar los márgenes del Sistema Nacional de Refinación.
Ante la falta de avances, contratistas, sindicatos y proveedores anunciaron que el próximo martes viajarán a Ciudad de México para exigir a Pemex un calendario de pagos que permita reactivar la obra y contener el impacto económico en el Istmo de Tehuantepec y en Salina Cruz.
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